ODA
Una oda es una composición poética de tono elevado, que trata asuntos diversos entre los que se recoge una reflexión del poeta. Según el tema que se cante, puede ser sagrada, heroica, filosófica, amatoria. En general se aplica a todo poema destinado a ser cantado. En este canto el hablante manifiesta toda su pasión, efervescencia y entusiasmo, para plasmar belleza en el poema.
ODA A LA PAREJA
(Pablo Neruda)
Reina, es hermoso ver
marcando mi camino
tu pisada pequeña
o ver tus ojos
enredándose
en todo lo que miro,
ver despertar tu rostro
cada día,
sumergirme
en el mismo fragmento
de sombra
cada noche.
Hermoso
es ver
el tiempo
que corre
como el mar
contra una sola proa
formada por tus senos y mi pecho,
por tus mies y mis manos.
Pasan por tu perfil
olas del tiempo,
las mismas que me azotan
y me encienden,
olas como furiosas
dentelladas de frío
y olas como los granos
de la espiga.
pero
estamos juntos,
resistimos,
guardando
tal vez
espuma negra o roja
en la memoria,
heridas
que palpitaron como labios o alas.
Vamos andando juntos
por calles y por islas,
bajo el violín quebrado
de las ráfagas,
frente a un dios enemigo,
sencillamente juntos
una mujer y un hombre.
Aquellos
que no han sentido cada
día del mundo
caer
sobre la doble
máscara del navío,
no la sal sino el riempo,
no la sombra
sino el paso desnudo
de la dicha,
cómo podrán cerrar
los ojos,
los ojos solitarios y dormir?
No me gusta
la casa sin tejado,
la ventana sin vidrios.
No me gusta
el día sin trabajo,
ni la noche sin sueño.
No me gusta
el hombre
sin mujer,
ni la mujer
sin hombre.
Contémplate,
hombre o mujer, que nada
te intimide.
En algún sitio
ahora
están esperándote.
Levántate:
tiembla
la luz en las campanas,
nacen
las amapolas,
tienes
que vivir
y amasar
con barro y luz de vida.
Si sobre dos cabezas
cae la nieve
es dulce el corazón
caliente de la casa.
De otra manera,
en la intemperie, el viento
te pregunta:
dónde está
la que amaste?
y te empuja, moriéndote, a buscarla.
Media mujer es una
y un hombre es medio hombre.
En media casa viven,
duermen en medio techo.
Yo quiero
que las vidas se integren
encendiendo los besos
hasta ahora apagados.
Yo soy el buen poeta
casamentero. Tengo
novias
para todos los hombres.
Todos los días veo
mujeres solitarias
que por ti me preguntan.
Te casaré, si quieres,
con la hermana
de la sirena reina de las islas.
Por desgracia, no puedes
casarte con la reina,
porque me está esperando.
Se casará conmigo.
ÉGLOGA
Es una composición poética típica de los segmentos pastoriles, donde se hace una caracterización a la naturaleza y se le idealiza. Alude a paisajes bucólicos, mientras expresa acontecimientos referidos al amor. En ocasiones la égloga se relaciona con elementos dramáticos e incluye personajes.
ÉGLOGA “EL DULCE CANTAR DE DOS PASTORES”
(Autor: Garcilaso de la Vega)
El dulce lamentar de dos pastores,
Salicio juntamente y Nemoroso,
he de contar, sus quejas imitando;
cuyas ovejas al cantar sabroso
estaban muy atentas, los amores,
(de pacer olvidadas) escuchando.
Tú, que ganaste obrando
un nombre en todo el mundo
y un grado sin segundo,
agora estés atento sólo y dado
el ínclito gobierno del estado
Albano; agora vuelto a la otra parte,
resplandeciente, armado,
representando en tierra el fiero Marte;
agora de cuidados enojosos
y de negocios libre, por ventura
andes a caza, el monte fatigando
en ardiente jinete, que apresura
el curso tras los ciervos temerosos,
que en vano su morir van dilatando;
espera, que en tornando
a ser restituido
al ocio ya perdido,
luego verás ejercitar mi pluma
por la infinita innumerable suma
de tus virtudes y famosas obras,
antes que me consuma,
faltando a ti, que a todo el mondo sobras.
En tanto que este tiempo que adivino
viene a sacarme de la deuda un día,
que se debe a tu fama y a tu gloria
(que es deuda general, no sólo mía,
mas de cualquier ingenio peregrino
que celebra lo digno de memoria),
el árbol de victoria,
SONETO
Este tipo de poema está compuesto por catorce versos endecasílabos (es decir, de 11 sílabas), donde existe rima consonante. Estos versos están divididos en dos cuartetos y dos tercetos. El soneto se origino en Italia. Se organiza con dos cuartetos (dos estrofas de cuatro versos cada uno) y dos tercetos (dos estrofas de tres versos) encadenados.
ANTONIO MACHADO
Soneto con serventesios:
Tuvo mi corazón, encrucijada
de cien caminos, todos pasajeros,
un gentío sin cita ni posada,
como en andén ruidoso de viajeros.
Hizo a los cuatro vientos su jornada,
disperso el corazón por cien senderos
de llana tierra o piedra aborrascada,
y a la suerte, en el mar, de cien veleros,
Hoy, enjambre que torna a su colmena
cuando el bando de cuervos enronquece
en busca de su peña denegrida,
vuelve mi corazón a su faena,
con néctares del campo que florece
v el luto de la tarde desabrida
ELEGÍA
Es un poema al dolor, por haber perdido algo. El poeta expresa sus sentimientos de angustia y desamparo, relacionados a circunstancias de muerte o de profunda lamentación.
DR. MATÍAS RAFIDE
ELEGIA POR UN ANGEL QUE PERDIO LAS ALAS
I
Demasiado fugaz y demasiado
aroma de canción desconocida,
florecer de la luz, joya encendida,
lenguaje del ayer hoy clausurado,
Ya nada importa, nada demasiado:
ni tu cielo ni lámpara encendida
ni la oración que desangró tu herida
ni tu licor sin mácula alcanzado.
Quieto quedó durmiendo tu capullo,
tu corazón fundido en el murmullo
donde la estrella forja su vestido.
Las manos extraviadas se te vuelan,
solamente las lunas te consuelan
y acallan el latir de tu gemido.
II
Sin rosas en las manos, sin espinas,
sólo con lluvias en la cabellera,
te deshaces abriendo la primera
ventana celestial de la neblina.
Ya nunca más tu rostro me ilumina
sobre la tarde hermana, compañera,
ni se avista tu sombra volandera
como un astro que rueda si camina.
Te acercas a ser nube o mariposa
con alas de amaranto, melodiosa
versión de florecer en poesía.
Te acercas a ser flama ya marchita;
pero arribas, lo sé, tarde a la cita
donde es posible detener al día.
MADRIGAL
Es un canto al amor puro, un poema breve en su extensión, que manifiesta los sentimientos de amor del hablante lírico. Uno de los poemas de este tipo es el siguiente:
AUTOR: GUTIERRE DE CETINA
Ojos claros, serenos,
si de un dulce mirar sois alabados,
¿por qué, si me miráis, miráis airados?
Si cuanto más piadosos
más bellos parecéis a aquel que os mira,
no me miréis con ira,
porque no parezcáis menos hermosos.
¡Ay tormentos rabiosos!,
Ojos claros, serenos,
ya que así me miráis, miradme al menos…
EPIGRAMA
Es un poema mucho más breve que el madrigal, puede llegar a ser de dos versos, en el que el hablante va exponiendo un sentimiento de alegría o, mejor dicho, de festividad, con toques de ironía, de sarcasmo y en doble sentido.
MARIO BENEDETTI
Hombre que mira la luna.
Es decir la miraba porque ella
se ocultó tras el biombo de nubes
y todo porque muchos amantes de este mundo
le dieron sutilmente el olivo
con su brillo reticente la luna
durante siglos consiguió transformar
el vientre amor en garufa cursilínea
la injusticia terrestre en dolor lapizlázuli
cuando los amantes ricos la miraban
desde sus tedios y sus pabellones
satelizaba de lo lindo y oía
que la luna era un fenómeno cultural
pero si los amantes pobres la contemplaban
desde su ansiedad o desde sus hambrunas
entonces la menguante entornaba los ojos
porque tanta miseria no era para ella
hasta que una noche casualmente de luna
con murciélagos suaves con fantasmas y todo
esos amantes pobres se miraron a dúo
dijeron no va más al carajo selene
se fueron a su cama de sábanas gastadas
con acre olor a sexo deslunado
su camanido de crujiente vaivén
y libres para siempre de la luna lunática
fornicaron al fin como dios manda
o mejor dicho como dios sugiere.